Coloridos chorros de pintura simulan grandiosas esculturas flotantes

Cassandra Warner y Jeremy Floto del estudio Floto+Warner, han producido recientemente una hermosa serie de fotografías titulada Clourant la que convierte chorros de pintura en verdaderas y magníficas esculturas que se posan en el aire.

Las imágenes fueron tomadas a una velocidad de captura de 1/3,500 por segundo, teniendo como resultado espectaculares y novedosas piezas de arte. Al mirar la serie se percibe una grandiosidad absoluta, siendo esto resultado evidente de un trabajo acucioso y de un manejo prácticamente perfecto de las variables tiempo y espacio.

Ambos artistas declaran:

“Colourant es una serie de eventos que pasan como un flash imperceptible frente a los ojos. Un momento fugaz que bloquea y oscurece el paisaje, un graffiti momentáneo del aire y el espacio. Es una creación de formas de la naturaleza no experimentada por el ojo humano, son anomalías de corta duración que se congelan para nosotros. La transformación de lo no discernible y lo efímero a lo eterno”.

 Visto en Thisiscolossal