Por Simona Villela
14 febrero, 2015

Bueno, y en los de tu marido, claro.

Cuesta entender cómo algo tan diminuto como un gen puede afectar en el complejo universo que es el comportamiento humano. Pequeñas diferencias en la composición genética de los individuos los puede llevar a ser más o menos sensibles a la calidad emocional de su matrimonio. Y la respuesta está en en algo llamado serotonina, un neurotransmisor que incide en la inhibición de la ira, la agresión, la temperatura corporal, el humor, el sueño, la sexualidad, y el apetito. Suena complicado, pero aquí te lo explican en fácil:

httpv://youtu.be/UlB5taS4JQU

Original

Foto de portada: WeHeartIt