¡Me dio miedo!
Nuestra visión periférica es responsable de un gran porcentaje de nuestra vista, y permite que los humanos tengamos un campo de visión de 220º horizontal y de 170º vertical. Sin embargo, es imperfecta, y puede hacernos ver cosas que realmente no están ahí…
Como lo que vas a presenciar ahora mismo:
Observa fijamente la cruz, sin perderla de vista:
Mientras más rato miras la cruz del centro, los rostros de estos famosos se comienzan a distorsionar y transformar. ¿Asustado? No deberías:
La visión periférica es el campo visual que existe “fuera” de nuestra visión. Esto quiere decir que mientras nuestros ojos se enfocan directamente en un objeto frente a nosotros, aún tenemos la capacidad de ver los objetos que se encuentran a nuestro alrededor, aquellos que no están directamente en nuestra línea de visión. Pero como dijimos, este campo de visión es bastante impreciso.
Cuando nuestro campo de visión se encuentra vacío (como es el caso del área de color negro con la cruz), toda la información que el cerebro se encuentra tratando de procesar, provendrá del campo de visión periférica. Es así como nuestro cerebro intentará juntar las dos imágenes para formar una sola. Por desgracia, esta tarea es bastante difícil para nuestro cerebro: tratará de combinar los rasgos faciales (en vez de los dos rostros completos) para procesar las dos imágenes con suficiente rapidez antes de que aparezcan las siguiente con nueva información.
¡Nuestro cerebro puede ser muy extraño algunas veces!