Unos tres meses antes de su fallecimiento, Sam Berns de 17-años de edad, dio este discurso explicando su aversión por los obstáculos de la vida y sus estrategias para vencerlos. Cuando tenía 2 años de edad, Sam fue diagnosticado con una enfermedad poco frecuente, progeria, que provoca un rápido envejecimiento y otros efectos secundarios, ninguno de los cuales pudo impedir que Sam llevara una vida feliz.
httpv://youtu.be/xlMOX0-cIAY