Me impresiona su sinceridad y humildad.

Stephen Curry fue la gran figura del básquetbol de los EE.UU. durante la última temporada. Guió a los “Golden State Warriors” al título de la NBA y por ende le entregaron el premio al jugador más valioso del torneo. Curry, emocionado por el reconocimiento, se mostró muy agradecido de su familia y de Dios, de quién se declaró un humilde servidor. Un gesto muy humilde para una figura increíble del baloncesto:

httpv://youtu.be/-J5hIf5h2wQ

Pero su fe no es un secreto y es su gran motiviación. El jugador lleva en su calzado deportivo una inscripción que dice “4:13”, que hace referencia a Filipenses 4:13, su pasaje favorito de la Biblia: “Puedo hacer todas las cosas a través de Cristo, que me fortalece”.

Un hombre muy talentoso pero a la vez muy espiritual.