Si sigues estos consejos, tu tatuaje se mantendrá intacto por más tiempo.
Elegir a un tatuador con buena reputación es solo el primer paso hacia tener un tatuaje del cual estar orgulloso. Una vez que te lo haces, es muy importante que te lo cuides porque incluso el mejor tatuaje puede arruinarse si no lo cuidas bien. Los consejos cambian de artista a artista, pero aquí tienes un resumen de lo que tienes que evitar hacer para mantener tu tatuaje limpio, nítido y con los colores vivos.
1. Evita sumergir el tatuaje
Hasta que se te haya curado completamente el tatuaje, evita nadar en la piscina, el mar o meterte en la bañera. Hay dos razones para esto. Primero: exponer tu tatuaje a mucha agua puede sacar tinta de tu piel y dañar la apariencia del tatuaje. Segundo: el agua en las piscinas, el mar o en la bañera puede contener suciedad, bacterias, productos químicos y otras impurezas que pueden hacer que tu tatuaje se infecte. Es mejor que hasta que no se cure, lo enjuagues en la ducha o el lavabo.
2. No expongas tu tatuaje nuevo al sol
La luz del sol es el peor enemigo de los tatuajes nuevos. Los rayos del sol pueden causar que tu piel se ampolle y aclare el color de tu tatuaje. Por este motivo, es mejor mantener tu tatuaje cubierto y alejado de la luz del sol durante al menos 3 o 4 semanas hasta que la curación inicial se haya completado. Después de ese tiempo tendrás que seguir protegiendo tu tatuaje usando un protector solar del nivel 30. Esto evitará que tu tatuaje palidezca con el sol, manteniendo los colores por más tiempo.
3. No te rasques el tatuaje
A medida que se cura, tu tatuaje empezará a formar costra. Es normal, y las costras tienen que dejarse secar y caerse por sí mismas. No intentes acelerar el proceso rascándote las costras. Esto puede causar que se caigan prematuramente, dejando agujeros o manchas más claras en tu tatuaje. Además, puedes hacer que el tatuaje se infecte. Puedes aliviar el picor golpeando el tatuaje con la palma de la mano, o con un poco de crema hidratante.
4. Evita la ropa ceñida
Evita ponerte ropa ceñida en la zona donde lleves el tatuaje, especialmente al principio. Cuando tu tatuaje se está curando, filtrará plasma y exceso de tinta, que puede provocar que la ropa se pegue al tatuaje. Esto hará que quitarse la ropa sea doloroso y puede arrancar las costras recientes. Además, la ropa ceñida evita que entre el suficiente oxígeno a tu tatuaje, y el oxígeno es esencial para el proceso de curación.
5. Evita hacer ejercicio intenso
Los tatuajes que cubren zonas grandes, o los que están cerca de las articulaciones (como los codos o las rodillas), pueden tardar más en curarse si la piel se ve forzada a entrenamientos intensos u otras actividades físicas. El movimiento causará que la piel se agriete y se irrite, prolongando el proceso de curación del tatuaje. Por esta razón, debes evitar entrenamientos innecesarios durante al menos unos cuantos días después de hacerte el tatuaje.
6. Evita la hinchazón
La hinchazón puede ocurrir cuando te haces tatuajes nuevos en los pies, tobillos o en la pantorrilla, especialmente si estás de pie mucho rato. Si esto ocurre, puedes reducir la hinchazón tomándote un ibuprofeno, aplicando una compresa fría en la zona inflamada y elevando los pies y piernas.
Seguro que si sigues estos tips, tu tatuaje durará intacto por mucho más tiempo y te podrás evitar cualquier tipo de infección o enfermedad.