Por Gustavo Aldunate
4 marzo, 2015

¿Cómo nadie pensó en esto antes?

Las cosas en São Paulo, Brasil, no están tan bien como las pintan los folletos turísticos. En las favelas -asentamientos precarios que crecen en torno a las grandes ciudades del país- alrededor de 12 millones de personas se estaban quedando sin agua potable. Pero una mujer, tenaz y decidida, decidió hacer algo al respecto. Su nombre es Terezinha Silva:

httpv://youtu.be/SxChoOnWnFY

Esto demuestra que un pequeño y sencillo invento puede solucionar un gran, gran problema.

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