Por Ignacio Mardones
6 julio, 2015

Espero que pueda tener una vida normal.

Las impresoras 3D son capaces de logros increíbles, esta vez salvaron la vida de un pequeño niño que no podía respirar. Kaiba Gionfrodo tenía una enfermedad letal llamada traqueomalacia, los doctores le dieron poco tiempo de vida, sin embargo, un grupo de ingenieros de la Universidad de Michigan desarrolló un dispositivo que pudo salvarlo. La enfermedad de Kaiba es congénita y afecta la tráquea, debilitando sus paredes y haciendo imposible que la persona respire. La solución que encontraron, fue crear un modelo de la tráquea del niño e implantárselo:

httpv://youtu.be/JHNUYD9p4-I

Al principio, los ingenieros estaba escépticos con su nuevo invento, pero todo funcionó bien y Kaiba pudo dejar de utilizar el ventilador artificial luego de 3 semanas. El dispositivo además está hecho de un material biodegradable, por lo que dentro de un tiempo se desintegrará, pero el niño podrá seguir respirando normalmente.

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Kaiba fue el primer bebé en recibir este tipo de implante 3D, pero desde que ocurrió no ha sido el único; ya varios niños han podido ser salvados con este nuevo invento y sólo hay que esperar para que se comienza a utilizar más masivamente.

¿Qué te parece esta nueva tecnología?

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