Conoce a esta aspirante a modelo que está cambiando los estándares de belleza

Esta chica cambiará el mundo…

Ella es Madeline Stuart y su plan es cambiar la visión que la sociedad tiene de las personas con Síndrome de Down. Por eso decidió convertirse en modelo, porque cree que tiene el poder de derribar estereotipos: “La exposición ayudará a crear aceptación en la vida”, dice en su página de Facebook.

La chica tiene 18 años, vive en Australia y su determinación ha sido muy grande. Ha bajado casi 18 kilos, gracias a que practica danza, nado y es porrista. Pero este cambio no es producto de la mera vanidad. Madeline está decidida a pelearse con los estándares de belleza más clásicos, demostrando que una persona como ella, con Síndrome de Down, sí puede triunfar en el mundo de la moda. 

En su fan page, la chica sube fotos en las que luce alegre, bonita y, sobre todo, aceptándose a sí misma. Estas son algunas de ellas:

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Este cambio en su vida le ha hecho ganar mucha energía y confianza en si misma, según ha contado Rosanne, la madre, quién le ayuda a llevar la página de Facebook y ha motivado a su hija a esforzarse por cumplir su sueño.

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No ha sido fácil para Madeline y su madre conseguir esto. Cuando era una bebé, hubo personas que le dijeron a Rosanne que no debía mostrarla en público. Incluso sus doctores le dijeron que Madeline no podría alcanzar ninguno de sus objetivos. Pero se equivocaron.

So 18 months ago I decided to turn my weight around and to concentrate on my health. This is the outcome. Please like…

Posted by Madeline getting Downs to modelling on Tuesday, May 12, 2015

“Hace 18 meses decidí preocuparme de mi peso y concentrarme en mi salud. Este es el resultado. Por favor sigan y compartan mis fotos si creen que la salud es tan importante. Ayúdenme a motivar al resto a estar saludable”.

Madeline en estos momentos está buscando un agente y su plan es cambiarle la mentalidad a las personas. “Es tiempo que la sociedad se de cuenta las personas con Síndrome de Down pueden ser sensuales y bonitas y deben ser celebradas”, dijo la madre.

Más allá del físico, lo que a ella le preocupa es la inclusión. Y es que su hija puede tener tantos sueños como cualquier otra…