Cómo se siente tener un ataque de pánico

¿Cómo le explicas a alguien que sientes que podrías estar muriendo sin sonar completamente loco y paranoico?

Durante los últimos años he empezado a tener ataques de pánico y me he dado cuenta de que explicar lo que se siente a alguien que nunca lo ha experimentado antes es mucho más difícil de lo que parece. La mayoría de las personas que no han pasado por eso, realmente no tienen ni idea de lo que son.

Es difícil saber exactamente lo que necesitas cuando estás teniendo un ataque de pánico e incluso a veces es difícil aceptar que estás teniendo uno. Así que, en un intento por ayudar a la gente a entender lo que sucede (aunque difiera de persona a persona) lo explicaré de la mejor forma posible:

Es como ser tragado por todo lo que te rodea al mismo tiempo. 

Es como si, uno por uno, todos y cada uno de los estímulos que te rodean, se apoderasen de tu mente y cuerpo. Sonidos, sentimientos o visiones te absorben por completo y ese simple estímulo se convierte en toda tu realidad. Esa cosa se convierte en cada pensamiento que pasa por tu mente y cada sensación física y emocional que tienes.

La música se filtra a través de tus oídos y se queda atascada golpeando dentro de tu cerebro, contra tu frente y contra las paredes de tu vacío cuerpo. Las voces y las conversaciones invaden tus pensamientos y hacen eco por encima de cualquier otra cosa.

Cada espacio se condensa en sí de forma tan pequeña que te paralizas. Cada espacio se convierte en el espacio equivocado para estar y cada segundo te azota con la sensación de tener que escapar, pero sin saber hacia dónde. Y eso solo empeora las cosas.

Prácticamente puedes verte a ti mismo, atrapado, ahogado, como si no fueras tu mismo.

Te estremeces desde los dedos de tus manos hasta la punta de tus pies, y tus piernas tiemblan tanto que casi no puedes estar parado. Tu pecho palpita fuertemente y se te forma un nudo en el estómago, hasta que llegas a pensar que vas a vomitar o, quizás, a explotar. Empiezas a ver túneles hasta que ya no puedes centrarte o ver claramente. Tu cabeza siente la luz, como si fuera a desaparecer de un momento a otro, tus pulmones de repente se reducen a la mitad y apenas pueden mantener oxígeno suficiente como para mantenerte consciente.

Esto domina cualquier pensamiento racional. No entiendes por qué o cómo está sucediendo, pero estás seguro de que no existen mejores escenarios. Estás seguro de que estás atascado en tu cuerpo y mente para siempre…

Visto en: Huffingtonpost.com