Si el dinero no compra la felicidad, es porque lo estamos gastando mal.
Michael Norton en una excepcional charla, muestra los resultados de una investigación sobre cómo el dinero puede, en efecto, comprar la felicidad, cuando no lo gastamos en nosotros mismos.
Presten atención a los datos sobre las maneras en las que los gastos en bien social pueden ser beneficiosos para nosotros mismos, nuestro trabajo, y por supuesto hacia otras personas.
httpv://youtu.be/a6lGPLVt90E