¡A quién no le ha pasado!
No hay nada más desagradable que un fregadero tapado, emana un horrible olor y simplemente no te deja lavar tus platos. Si pensaste en llamar a un plomero para arreglarlo, o comprar algún ácido fuerte y peligroso, ¡olvídate! Aquí te damos una sencilla fórmula que te simplificará la vida, solo necesitas vinagre, bicarbonato y agua hirviendo.
httpv://youtu.be/BsOihDnkVr4
Así cómo el volcán que hacías de niño en clases de ciencias naturales…
¡Este es un santo remedio!