Esta tarta de cebolla caramelizada es tan deliciosa y simple de hacer que no lo podrás creer. Te acordarás de mis palabras cuando tus amigos te pregunten en qué panadería la obtuviste para poder comprarla ellos también. En una de esas te conviene inventarles sobre un lugar donde la hacen, ya que podrían empezar a encargártela para todas las reuniones sociales de ahí en adelante.
Porciones: 9 a 12 pedazos de tamaño de aperitivo
Tiempo de preparación: 1 hora
Ingredientes:
2 cucharadas de aceite de oliva
4 tazas de cebollas rebanadas, de raíz a la punta en trozos de 6 milímetros de grosor (2 a 3 cebollas medianas)
1 cucharada de azúcar morena
2 cucharadas de vinagre balsámico
1/2 cucharadita de sal
1/2 cucharadita de pimienta
225 gramos de hojaldre congelada (descongelada un par de horas en el refrigerador)
57 gramos de queso Brie enfriado, sin cáscara y cortado en cubos
57 gramos de queso Gorgonzola u otro queso azul, cortado en cubos
2 cucharadas de estragón fresco picado
Preparación:
Calienta el aceite en una sartén grande sobre fuego medio-alto. Coloca las cebollas y cocina por 10 minutos o hasta que estén marchitas y comenzando a dorarse. Añade el azúcar, vinagre, sal y pimienta. Baja la llama y cocina gentilmente, sin tapar la sartén, por unos 20 a 25 minutos o hasta que estén muy caramelizadas. Vierte un poco de agua si es que las cebollas se ven como si estuvieran comenzando a secarse. Deja enfriar.
Estira el hojaldre hasta formar un rectángulo de 25-35 centímetros (o la forma que quieras darle). Coloca el hojaldre en una bandeja para hornear cubierta con papel de hornear. Pincha con un tenedor cada varios centímetros para evitar que se formen burbujas grandes dentro del hojaldre mientras se hornea.
Esparce las cebollas sobre el hojaldre, llegando hasta los bordes. Cubre con queso. Rocía con estragón. Refrigera si no la hornearás de inmediato.
Mete en un horno pre calentado a 205° C por 19 o 20 minutos o hasta que el queso se haya derretido y el hojaldre esté crujiente. Enfría por 5 minutos. Corta en pedazos, ¡y disfruta!
Todas las fotografías pertenecen a Simply recipes