Pensar en estos nachos me abre el apetito de tal manera, que tendré que dejar esto hasta aquí, para ir a la cocina a prepararlos.
Porciones: 4 platos normales, 2 platos groseros
Tiempo de preparación: 30 minutos
Ingredientes:
2 cucharadas de aceite de oliva
1 calabaza butternut pequeña, pelada y cortada en cubos
1/4 cucharadita de sal
1/4 cucharadita de pimienta
1/8 cucharadita de nuez moscada
Una pizca de cardamomo
1 chalote, cortado en cubos
2 dientes de ajo, picados
1 1/2 cucharadas de mantequilla sin sal
350 gramos de champiñones cremini en rebanadas, picados en pedazos grandes
225 gramos de queso Fontina, recién rallado
179 gramos de queso Gruyer, recién rallado
12 a 15 hojas frescas de salvia
Para servir:
Crema agria o yogurt griego
Glaseado de balsámico para rociar
Preparación:
Calienta una sartén grande sobre fuego medio y añade una cucharada de aceite de oliva. Coloca la calabaza picada en la sartén y sazona con sal, pimienta, nuez moscada y cardamomo, revolviendo bien. Tapa la sartén y cocina durante unos 10 minutos hasta que la calabaza esté tierna al pinchar con un tenedor, revolviendo una o dos veces. Retira la calabaza de la sartén y deja a un lado en una fuente.
En la misma sartén, añade otra ½ cucharada de aceite de oliva sobre fuego bajo. Coloca los chalotes y ajo, revolviendo bien y cocina durante 2 minutos. Añade 1 cucharada de la mantequilla y una vez que se haya derretido añade los champiñones, revolviendo para cubrirlos todos de mantequilla. Cocina hasta que los champiñones estén blandos, durante unos 5 minutos, revolviendo ocasionalmente. Apaga la llama y rocía con una pizca de sal y pimienta. Coloca los champiñones en otra fuente y deja a un lado por un minuto.
En la misma sartén, vierte el aceite de oliva y mantequilla que quedan sobre fuego medio. Una vez que la mantequilla se ha derretido y esté chisporroteando, deja caer las hojas de salvia y cocina por unos 30 segundos por lado. Retira las hojas y colócalas sobre una toalla de papel hasta que estés listo para usarlas.
Pre calienta la parilla de tu horno al nivel más alto. A mí me gusta montar los nachos cubriendo la mitad de los chips con un puñado de queso, algo de calabaza, champiñones y luego otro puñado de queso y así hasta que tengo 2 o 3 capas. ¡Así todo tendrá queso!
Coloca los nachos en el horno por 2 a 3 minutos, hasta que el queso se derrita y este burbujeante y dorado. Retira del horno y coloca las hojas de salvia encima. Sirve de inmediato con crema agria/yogurt griego y un rocío de glaseado de balsámico si quieres.
Todas las fotografías pertenecen a How sweet it is