Romper un huevo no es algo extraordinariamente difícil y la verdad es que cualquiera puede hacerlo. Sin embargo, evitar que caiga un pedazo de cáscara a la sartén o morder un desagradable y crujiente trozo cuando estas en la mitad de tu omelet es realmente terrible. Es por esto, que practicar este simple truco culinario, te podría ayudar de por vida.
httpv://youtu.be/f51B2ID7gFA