Por Romina Bevilacqua
12 junio, 2015

No saben cuánto tiempo llevaba ahí atrapado, pero sus heridas demostraban lo desesperado que estaba el pequeño ciervo. 

Cuando Wildlife Aid recibió una llamada contándoles acerca de un cervatillo en problemas, no sabían con lo que se encontrarían. Simon, uno de los rescatistas, fue al lugar y tuvo que saltar algunas cercas para llegar donde se encontraba el pequeño animal. Cuando lo vio dijo: “Hay moscas alrededor de él, no es una buena señal”. El pequeño ciervo, una cría de ciervo corzo, se había quedado atascada en la reja, y por lo que Simon pudo notar, tenía varios moretones y heridas por intentar salir de ahí sin éxito. Él actuó de inmediato para ayudarla:

Según señala la organización de rescate de animales, muchas veces los ciervos quedan atrapados en las cercas, porque cuando ven que su cabeza y hombros pasaron por el estrecho lugar creen que el resto de su cuerpo también pasará a través de él, pero esto no siempre ocurre. Usualmente quedan atrapados sin poder salir hacia delante ni devolverse y se desesperan intentando zafarse de las barreras formando heridas en su cuerpo.