Por Romina Bevilacqua
15 abril, 2015

Estaba a unos metros del león cuando el sonido de su cámara alertó al animal. Segundos después comenzó a correr tras él. 

Muchas veces los fotógrafos de naturaleza enfrentan situaciones difíciles en las que su vida corre peligro. Es uno de los riesgos que corren al relacionarse con la vida salvaje, aunque también en ocasiones son ellos los que cometen el error –o irresponsabilidad– de no tomar las precauciones necesarias. Ese fue el caso del fotógrafo pakistaní, Atif Saeed, quien puso su vida en peligro al acercarse demasiado a un feroz león. Mientras iba de safari avistó a un león descansando en los pastizales. Decidió bajar el coche y se arrastró hasta quedar a sólo 3 metros del animal. Sin embargo cuando tomó la primera fotografía el sonido del obturador lo delató ante el gran felino. De inmediato el león se levantó y para convertir a Saeed en su presa.

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El fotógrafo, armado sólo con su cámara y sentado en el suelo, logró capturar algunas fotografías antes de salir corriendo hacia su coche. Había dejado la puerta abierta en caso de cualquier emergencia y justo logró cerrarla tras de sí antes de que el león lo alcanzara. “Estada frente a él y junto a mi automóvil con la puerta abierta. Estaba sentado a unos metros y él me estaba tratando como a su presa. Yo pensaba: ‘debo mostrar el carácter y estatus del león y esta era la única forma de lograrlo'”, cuenta él. 

“La historia terminó en pocos segundos, cuando el león saltó agresivamente hacia mí y casi me atrapa contra el coche. Estaba riendo en ese momento, pero ahora cuando pienso sobre el incidente no creo que sería capaz de volver a hacerlo. Fue un encuentro bastante cercano”, recuerda Atif Saeed.