Por Romina Bevilacqua
19 marzo, 2015

No creerás lo genial que es hasta que lo veas con tus propios ojos y lo mejor es que ¡No contamina!

Creo que ya estamos todo de acuerdo en que las botellas plásticas son una mala y muy contaminante idea. Demoran cientos de años en degradarse, cuestan más por litro que la gasolina y su preciado contenido, el agua, debiese ser un bien disponible para todos en todas partes. Pero esta vez el ingenio superó todas las expectativas cuando tres jóvenes inventaron este envase gelatinoso y comestible para almacenar agua. Conoce su extravagante diseño y cómo lo formaron en este video:

httpv://vimeo.com/106488023

Es flexible, tiene la textura de una gelatina, es fácil de masticar y aparentemente es sabrosa –aunque su consistencia sea un poco extraña–. Este envase para el agua fue desarrollado por Rodrigo García González, Pierre Paslier y Guillaume Couche en el programa de innovación y diseño “Innovation Design Engineering program” del Royal College of Art y el Imperial College en Londres.

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