Por Ignacio Mardones
8 julio, 2015

¡Y además le pagan por eso! 

Ella está disfrutando al máximo, recorre los lugares más fascinantes del mundo, y más encima le pagan por las fotografías que toma. ¿A quién no le gustaría vivir de esta manera cuando se tiene 23 años? ¡O la edad que sea!

Brooke Saward es la envidia de todos, esta joven australiana escribe en un exitoso blog de viajes llamado World of Wanderlust, el cual es visitado por casi un millón de personas al mes. Brooke, en un año, ya ha visitado cerca de 50 países en 6 continentes distintos, lo que es impresionante si se piensa que hace poco se graduó de la universidad…

https://instagram.com/p/2bhLKJsk69/?taken-by=worldwanderlust

Todo comenzó cuando hizo un viaje a Londres, sólo había comprado el pasaje de ida, por lo que se podía decir que más o menos intuía que le esperaban grandes aventuras. El que ese primer impulso se haya transformado en una travesía constante, es algo que no se esperaba, pero que recibió con los brazos abiertos. Ella comenzó a subir sus fotografías a las redes sociales, al poco tiempo tuvieron un éxito inesperado y los seguidores aumentaron hasta llegar a ser cientos de miles.

Sus plataformas son Instagram, Snapchat, y blogs en general, en éstos es donde sube los resultados de sus viajes.

& then I became a chief of a tribe. #Africa

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Gracias al tremendo éxito que ha tenido, ella puede hacer tratos con agencias, hoteles y rutas turísticas para que la alojen sin tener que pagar ni un solo dólar. Su blog le permite difundir y recomendar ciertos lugares, por lo que juega esta carta con inteligencia y el dinero no se transforma en un problema. Sus miles de fans están atentos a cada nuevo destino y la apoyan con múltiples comentarios…

For sure The best experience of my travel life to date. Just flew over Victoria Falls in Zambia and Zimbabwe (!!)

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¡Da envidia pensar en lo bien que se lo debe pasar Brooke Saward en su trabajo! Para ella no hay destinos inalcanzables, si quiere puede ir a lugares desérticos y al otro día tener los pies en la nieve de Siberia, volar a Cuba y luego transportarse a La Gran Muralla China. Y si se cansa, no hay problema: siempre puede quedarse bien arropada en la cama de su hotel, con su computador en las piernas, escribiendo sobre su día a día y editando fotos impresionantes.

¿Cambiarías tu vida por la de ella?

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