Lo que él dijo a sus padres los dejó devastados, pero así consiguió su propia tranquilidad.
¡Eres un sinvergüenza! ¿Acaso con tu padre te criamos para nada? Él acostumbraba a ir todos los años nuevos a visitar a sus padres, y ellos le preguntaban constantemente cuándo traería una mujer a casa. Ambos querían nietos, agrandar la familia, que su hijo de excelentes calificaciones se estableciera encontrando una compañera. Desconocían que por dentro él vivía un infierno; no quería seguir escapando, evadiendo el mismo tema que arrastró desde la universidad hasta su primer trabajo:
httpv://youtu.be/-UBHWJfNIz0