Directamente desde los países más fríos de Europa. Una receta que en esta ocasión tendrá un final dulce (también pueden tener rellenos salados), y te permitirá, por supuesto, terminar el día con dulzura también. Rellénalos con tu fruta favorita y date el gusto de ponerle unas calorías extras con alguna salsa deliciosa.
Tiempo de preparación: 20 minutos
Ingredientes:
Harina
Agua caliente
Pizca de sal
Relleno:
Variedad de frutas
Azúcar
Preparación:
La proporción de harina a agua es aproximadamente 4 a 1. Mezcla todo en una fuente. Mientras revuelves se verá como si no fuera posible que haya suficiente agua para humedecer toda la harina. En este punto, comienza a apretar y a amasar en la fuente, añadiendo un poco de harina si fuese necesario. ¡Está caliente y pegajoso! Ten cuidado de no amasar demasiado la masa. La consistencia de la masa cuando está lista es algo parecida a la de la plastilina Play-Dough.
Cuando la masa esté lista, enróllala creando un tronco (de quizás 2,5 centímetros de diámetro). Luego corta el tronco en pedazos uniformes. Mientras más grande sean, más grande serán los varenyky. A mí me gustan más pequeños para hacer postres, y más grandes y con rellenos más considerables para una gran variedad de comidas saladas.
Usando un uslero o tus dedos, aplana los pedazos hasta que se vean como discos redondos. Déjalos relativamente gruesos para que puedan estirarse cuando tengan el relleno. Vierte el relleno con una cuchara, yo utilicé cerezas sin cuesco cubiertas en azúcar. No viertas demasiado relleno ya que explotará, pero recuerda que un varenyky con poco relleno tampoco es muy agradable.
Manteniendo las puntas de los dedos con harina, dobla las masas circulares por la mitad alrededor del relleno y cierra los bordes pellizcándolos.
Déjalos caer de uno en una olla de agua hirviendo (yo le echo sal al agua, como para cocinar pasta). Revuelve gentilmente para que no se peguen. Cuando comiencen a flotar, deja que se cocinen por unos 5 minutos adicionales. Es bueno tener una cuchara ranurada para sacarlas del agua.
Puedes rellenarlos con todo tipo de frutas, queda mejor con los berries. Y para terminar. El toque final y absolutamente pecaminoso… Cúbrelos de mantequilla derretida y azúcar o algún jarabe. Los varenyky tradicionales son servidos con crema agria y/o cebollas salteadas.
Todas las fotografías pertenecen a Dishes and designs
