Por Bárbara Samaniego
28 enero, 2015

Estas imágenes ofrecen un recorrido escalofriante por el lugar donde murió más de 1 millón de personas, en manos de la gran maquinaria nazi, entre 1940 y 1945. Situado al sur de Polonia, Auschwitz se convirtió en el campo de exterminio más grande y letal de Adolf Hitler. El dron nos muestra el campo tal cual se encuentra hoy, 70 años después de ser liberado por las tropas soviéticas:

httpv://youtu.be/449ZOWbUkf0

Ciertas fotografías de este campo lograron trascender el paso del tiempo y hoy se encuentran en diversos museos y memoriales, que recuerdan con pudor uno de los momentos más oscuros de la humanidad. Sin embargo, ninguna de esas imágenes logra transmitir el verdadero sentir de ese lugar, la terrible sensación que flotaba sobre cada corazón oprimido y humillado: la desesperanza. Creemos que este video de apenas 3 minutos se acerca con algo más de precisión: la soledad y la desolación es lo que destaca en esta grabación, y nos entrega una idea bastante nítida y gráfica (aunque jamás equivalente) de lo que fue este régimen de muertes sistemáticas: sobrevolarás las vías del tren que llegan Auschwitz-Birkenau, por donde cientos de trenes llenos de víctimas de toda la Europa ocupada arribaban al campamento. Observarás las ruinas de chozas de madera, diseñadas en 1941 con la única finalidad de servir como lugar para el exterminio. Atravesarás la entrada a Auschwitz I, en cuyo arco, forjado con hierro, se leía “Arbeit Macht Frei”: el trabajo te hace libre. Curiosa y esperanzadora frase, que nunca se hizo realidad, puesto que en Auschwitz nada te hacía libre además de la muerte. Y por último, cruzarás el frío patio que separaba el bloque 10 del bloque 11; “El bloque de la Muerte”, donde se realizaban las ejecuciones y cuyos postes eran utilizados para colgar a los prisioneros por las muñecas.

En la actualidad, este campo se mantiene como Patrimonio de la Humanidad y funciona como museo, siendo visitado por miles de turistas y sobrevivientes cada año. Y sí, el video es terrible y angustiante, justamente porque la historia del holocausto es terrible y angustiante.