Muchos hemos visto misteriosas imágenes de naufragios en las profundidades del océano. Benjamin Van Wong llevó esto a otro nivel, realizando una peculiar sesión fotográfica en las costas de Bali. A pesar de que hubiera sido considerablemente menos complejo construir las fotografías digitalmente, Van Wong tomó un camino distinto, utilizando el lugar real del suceso como escenario. Sin duda no fue nada fácil, ya que para poder llevar a cabo el proyecto debió entrenar a un equipo de modelos y expertos del buceo y, por otro lado, pagar un permiso que le otorgó uso libre del naufragio por 50 años. La increíble sesión tomó lugar a 25 metros desde la superficie, y debido a las condiciones extremas y a las variadas limitaciones, a Van Wong no le quedó otra que confiar en la luz natural para generar las imágenes.
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