Por Ignacio Rojas
15 noviembre, 2014

Cuando el mediocampista del AC Milan Kevin-Prince Boateng oye cantos vulgares y racistas de la hinchada, y decide que ya es suficiente.

Muestra el balón a los aficionados racistas, y en un alarde de deportividad que procede a dejar el campo, lo siguen sus compañeros de equipo y para sorpresa de todos el equipo contrario también abandona el campo.

El mensaje a la comunidad, no podo ser más claro: No importa si eres hincha, no vamos a jugar por los racistas.

httpv://youtu.be/nXyqFZ_fghI

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