Por Ignacio Rojas
28 julio, 2014

Además del coro obscenamente pegadizo, escucha la crítica de como la industria de la música se alimenta de los jóvenes. Aprovecharse de las hormonas y las inseguridades nunca había sido tan mecanizado. No estoy diciendo que lo hayas hecho o algo por el estilo, pero esto puede cambiar la forma que escuchas a Justin Bieber y compañía.

httpv://youtu.be/wZXC_4XhGvQ

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